Decaído
La intransigente luz de las memorias me arrastra al vacío
Me esparce por el cuarto como incienso para sacrificio
Y me embeleso aspirando el veneno de mi esencia
Me convulsiono en el asco de ese hedor inexistente
Regando el vino de la melancolía
Trato de pintar sombras en el rostro de nuestros allegados ausentes
Trato de deshacer el nudo intramental que va coloreando sangre
Ensueños de la práctica de la muerte atentando contra mis lunas…
Hay un monstruo detrás de la enorme sábana que es mi mirada
Hay libros de tinta forzada e ideas de mentiras escupidas hacia lo que exige evadir la realidad
Un guión de vida improvisado a modo de falacia
Un deseo encarcelado y un vicio asesinado
Tengo en este momento palpitando mi corazón en mis manos
Presiono fuerte para que no explote
Lo calmo para que no devore mí alrededor…
Estoy teniendo una larga conversación con el abismo
Busqué ser escuchado en el viento pero mi respiración fue cortada
Estoy buscando una hoguera para redimirme en el fuego
Estoy buscando una jaula para evitar lastimar mientras me lastimo a mi mismo
Busco rosas para marchitarlas con mis dedos
Busco besos para succionarles el alma y saber como se siente la calidez…
La risa es la mejor cura para el mal humor
Y es el mejor catalizador de la tristeza
Juego para sentir que soy parte de algo
Es una lastima que el juego se llame “yo pierdo”
¿Trataré una vez más de superarme a mi mismo?
Superar mi dolor, superar mis complejos
Esconderlos debajo de la cama…
Encargárselos a mis amigos imaginarios
¿Saldré vestido de gala para aparentar que la miseria no me toca una vez más?
...NO...
Es hora de beber de nuevo el ajenjo de la cancina sonata de la desdicha
Flotar en la etérea infusión de la sal amarga para sentirme real de nuevo
Cortar este estúpido deseo de volar por los cielos
Ahogar mi inútil sentimiento de esperanza y negar los estúpidos sueños que he tenido estas últimas noches…
Hoy decidiré una vez más que no vale la pena
Hoy decidiré enamorarme de la ausencia
De mi esencia púrpura líquida que remembra a los tiempos de los desfallecimientos como lección
De el vicio de las palabras
El vicio de las lágrimas
Las velas brillan negro
Sé que este no es mi hogar
Las guitarras lloran como violines
Sé que este no es el camino…
Moscas y nada más en el tabernáculo de la vida por pasión engendrada…
Si la vida es aire entonces yo soy cenizas
Si la vida es agua entonces yo soy lágrimas
Hay varias palabras que decir antes de lograr escapar de la introspección esclavizante de mi alma, pero no servirá de nada mencionarlas hasta que el péndulo empiece a robarme el aliento… podría hablar siglos, pero la verdad es que estoy cansado de hacerlo cuando no siento la sangre resbalar por mi cara y la siento caer en el mundo de los que aún tienen esperanza…
Hola… no es la voz dentro de mi cabeza si no el espíritu olvidado de mi yo intentando recordarme…Este es el sueño sin sueños, el sueño del insomnio… Azul descompasado de garras que idolatran al insensato baile de las rosas de pétalos negros… no logro danzar al ritmo del apogeo…pero es suficiente unir los puntos del firmamento para delinear el sentido de cada una de las estrofas que destrozarán nuestras defensas y nos romperán en llanto… ¿Estará ahí la luna para prestarme su faz de plata? ¿Para llorar la sinfonía de nuestra despedida?
Este es un día perdido
Atado a una noche derrochada
Luchamos contra la naturaleza de mi más primordial consecuencia
El éter de todas estas señales moribundas
El lobo que guarda mi pupila
Sinfonía de laberintos extraviados en lo vasto de un mar que toma mi mano como hermano
Vagabundo de la misma soledad
Más allá del día y de la noche
Voces que guardan la esperanza de un mañana despojado de soledad
Silencio expectante detrás del sol y el crepúsculo de mis días,
Y aún así… todo lo que tenemos es propio sol…
Todo lo que tengo está aquí conmigo…
No hay piel debajo del velo
No hay amante bajo las sábanas
La muerte me acariciará cual madre a su hijo
A veces todo lo se necesita es un beso para ganar la redención…
Cuando todos los astros hayan desaparecido del firmamento
Cuando cada océano se haya secado
Solo quedará el silbido cristalino del ansia intempestiva por volver a soñar
Soñar de nuevo una sola vez y para siempre…
Quizá ahí encuentre el arcoíris bajo la tempestad
Quizá ahí pueda volver a la estabilidad
Quizá eso sea lo que necesito…
Me esparce por el cuarto como incienso para sacrificio
Y me embeleso aspirando el veneno de mi esencia
Me convulsiono en el asco de ese hedor inexistente
Regando el vino de la melancolía
Trato de pintar sombras en el rostro de nuestros allegados ausentes
Trato de deshacer el nudo intramental que va coloreando sangre
Ensueños de la práctica de la muerte atentando contra mis lunas…
Hay un monstruo detrás de la enorme sábana que es mi mirada
Hay libros de tinta forzada e ideas de mentiras escupidas hacia lo que exige evadir la realidad
Un guión de vida improvisado a modo de falacia
Un deseo encarcelado y un vicio asesinado
Tengo en este momento palpitando mi corazón en mis manos
Presiono fuerte para que no explote
Lo calmo para que no devore mí alrededor…
Estoy teniendo una larga conversación con el abismo
Busqué ser escuchado en el viento pero mi respiración fue cortada
Estoy buscando una hoguera para redimirme en el fuego
Estoy buscando una jaula para evitar lastimar mientras me lastimo a mi mismo
Busco rosas para marchitarlas con mis dedos
Busco besos para succionarles el alma y saber como se siente la calidez…
La risa es la mejor cura para el mal humor
Y es el mejor catalizador de la tristeza
Juego para sentir que soy parte de algo
Es una lastima que el juego se llame “yo pierdo”
¿Trataré una vez más de superarme a mi mismo?
Superar mi dolor, superar mis complejos
Esconderlos debajo de la cama…
Encargárselos a mis amigos imaginarios
¿Saldré vestido de gala para aparentar que la miseria no me toca una vez más?
...NO...
Es hora de beber de nuevo el ajenjo de la cancina sonata de la desdicha
Flotar en la etérea infusión de la sal amarga para sentirme real de nuevo
Cortar este estúpido deseo de volar por los cielos
Ahogar mi inútil sentimiento de esperanza y negar los estúpidos sueños que he tenido estas últimas noches…
Hoy decidiré una vez más que no vale la pena
Hoy decidiré enamorarme de la ausencia
De mi esencia púrpura líquida que remembra a los tiempos de los desfallecimientos como lección
De el vicio de las palabras
El vicio de las lágrimas
Las velas brillan negro
Sé que este no es mi hogar
Las guitarras lloran como violines
Sé que este no es el camino…
Moscas y nada más en el tabernáculo de la vida por pasión engendrada…
Si la vida es aire entonces yo soy cenizas
Si la vida es agua entonces yo soy lágrimas
Hay varias palabras que decir antes de lograr escapar de la introspección esclavizante de mi alma, pero no servirá de nada mencionarlas hasta que el péndulo empiece a robarme el aliento… podría hablar siglos, pero la verdad es que estoy cansado de hacerlo cuando no siento la sangre resbalar por mi cara y la siento caer en el mundo de los que aún tienen esperanza…
Hola… no es la voz dentro de mi cabeza si no el espíritu olvidado de mi yo intentando recordarme…Este es el sueño sin sueños, el sueño del insomnio… Azul descompasado de garras que idolatran al insensato baile de las rosas de pétalos negros… no logro danzar al ritmo del apogeo…pero es suficiente unir los puntos del firmamento para delinear el sentido de cada una de las estrofas que destrozarán nuestras defensas y nos romperán en llanto… ¿Estará ahí la luna para prestarme su faz de plata? ¿Para llorar la sinfonía de nuestra despedida?
Este es un día perdido
Atado a una noche derrochada
Luchamos contra la naturaleza de mi más primordial consecuencia
El éter de todas estas señales moribundas
El lobo que guarda mi pupila
Sinfonía de laberintos extraviados en lo vasto de un mar que toma mi mano como hermano
Vagabundo de la misma soledad
Más allá del día y de la noche
Voces que guardan la esperanza de un mañana despojado de soledad
Silencio expectante detrás del sol y el crepúsculo de mis días,
Y aún así… todo lo que tenemos es propio sol…
Todo lo que tengo está aquí conmigo…
No hay piel debajo del velo
No hay amante bajo las sábanas
La muerte me acariciará cual madre a su hijo
A veces todo lo se necesita es un beso para ganar la redención…
Cuando todos los astros hayan desaparecido del firmamento
Cuando cada océano se haya secado
Solo quedará el silbido cristalino del ansia intempestiva por volver a soñar
Soñar de nuevo una sola vez y para siempre…
Quizá ahí encuentre el arcoíris bajo la tempestad
Quizá ahí pueda volver a la estabilidad
Quizá eso sea lo que necesito…
Una simple descarga... no es muy bueno, pero a mi me tranquiliza... en fin...
