La Máscara
Dirigido a la sombra ultramarina de los retazos del ayer, sincronizado con lo que es pasado, busco la obra maestra erigida en la inseguridad, tan apenado…y en una canción de una tierra olvidada en mi garganta, trémolo, indeciso, intento encontrar la salida de un paraje de atavíos grises y flores marchitas, campo de soledad donde el martirio se cultiva…
Imploto en la nube tormentosa de un instinto sobrevaluado, mientras esparzo lo que logré tener en un espacio ensimismado, permaneceré a la sombra del árbol bajo el cual amo sentirme maniatado, una vez más, tan apenado… tanto que deseo levantarme por lo menos una vez…
Si se disuelve el trance
Y hoy niego mi mentira
Puedo preguntarme
¿Para qué quedarme?
A pesar del futuro imberbe
Aquí en mi campo de espinas
Solo hay un mundo inerte
El espejo me reclamará por la imagen que le pertenece y buscará destriparme para sacar un yo ideal devorado por el hastío que en mí se manifiesta, retrocederé hasta que la cristalina mano se rompa y en la perpetuidad de mis decisiones construiré mi nuevo refugio, donde solo desde el fondo de mis ojos se encontrará la medida para juzgar la imagen a la cual me haré ciego…
Consternado, sabré que es en la nada donde fijo mi mirada inquisitiva, sombra de noches sin sentido y de poemas de belleza vacía…ahí donde materializo mis excusas, encarno mis estafas y realizo mis mentiras, esperando engañar a nadie, esperando creerme antes de atreverme a dar el paso fuera de la oscuridad, fuera del engaño donde falso es mi esfuerzo y falsa es la esperanza que da forma al olvido…
Incrementó mi frialdad, la aurora se paralizó en mi tierra muerta, he invadido los más sagrados templos de mi alma y ahora me descarna por dentro en reclamo de lo que me quise convertir…árdeme la plaga que sale de mi boca con mi himno de desencanto, apático, niego con el rostro que esta esencia se vea obsoleta al fin, pero mi muerte solo probó que el mundo que construí no es más para mí, y el silencio, la única promesa que me atreví a cumplir, fue la primera que rompí antes de partir:
Falso
Falso es el rostro con el que viví
Falsa es la mirada con la que os vi
Falsa es la intención de mi ser
Falsa es la negrura de mi rostro
Falsa es la oscuridad de mis palabras
Falsos son los poemas indescifrables
Falso es el muro impenetrable
Falso es mi camino
Falsa mi voluntad
Falsa mi fuerza
Y falso todo lo que con todo esto busqué
Falsos fueron mis deseos, hasta hoy…
Y caminando en el valle de una pequeña muerte encontré un respiro, insípido, casi amargo, aliento de una tierra llamada verdad, que el viento susurró que se encontraba en lo más profundo de un universo que mi nombre llevaba, y fue entonces que decidí caminar de nuevo…
Y verdadero es el dolor
Verdadera es mi intención
Tímidos mis movimientos
El inicio del viaje
Rota mi máscara
Puedo ver el lúgubre horizonte
Y verdaderos son mis sueños desde hoy…
2 comentarios:
Hay razones por las que a veces prefiero decirte Pablo =D y es ese universo que lleva tu nombre al que admiro.
te kiero! =D
Oye...
En serio parecen como retazos de un bizarro progreso.
Es agradable.
No comas aviones.
Te festejo el movimiento lento en el que se da el texto y que al final, el desenlace es "feliz", aunque siento que quizá está algo cortado.
Noté un par de faltas de ortografía XD...
Adiós.
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