Animae In Obitus: La Caminata

Late… late por favor…no te detengas, este dolor no es suficiente, aún quedan muchos caminos, la sangre en tus manos, no es suficiente… sigue caminando, sigue respirando… ese hoyo en el torso no va a derrumbarte, no va a liberarte… y aún así, no te alejará de nuestro viaje… camina, sé que estás cansado… camina… sé que lo sabes… no llegaremos a ningún lado…

Mi vida, mi orgullo, todo está en estos pasos, en este gatillo, resuene el redoble del acero y acompasen mi concierto el sonido del caer de los cuerpos… mis manos, ya no son mías, mis ojos, mi aliento, le pertenecen a aquella aldea, a aquella playa, a ese campo de batalla y a su tapiz de sangre que por ordenes fue impregnado como marca de malicia, la respuesta “¡Sí señor!” es mi única excusa, pues no lograré nada ni llegaré a ningún lado, pero el paseo no se acaba y ni siquiera se si incluso después de muerto, sienta que esto ya ha pasado…

Sé que este llanto no valdrá nada, mi sudor es una gota en medio de un mar, mi miedo es una lágrima en medio de un holocausto, y aunque contribuyo a la muerte y al dolor de un llamado enemigo, a veces pienso que mi mundo es el que muere cuando gano y descubro que sigo vivo… no quiero seguir, estos sentimientos, estos pensamientos teñidos de rojo no me dejarán vivir en paz, la sangre en mis manos, mi delirio de muerte inhumano, he matado a mi hermano y aún millar más… tendencias suicidas en cada gota de plomo que acierto … quiero salir, pero la realidad es que no estoy dispuesto a perder mi alma en esta cruzada, y mientras este corazón no lata por su cuenta, no puedo morir… sigue caminando, sigue latiendo… no puedo morir….

¿Cómo termine aquí? ¿Por qué?... quiero ir a casa… sigo caminando y sé que no llegaré a ningún lado, sigo matando y sé que la sangre que escurre no formará el camino a mi hogar, se que la mía tampoco… no puedo permitirme morir aquí…incluso estando cansado, mis pasos taciturnos al mismo tiempo que engullen en llantos de culpa me dan momentos de vida en los cuales esperar llegar a mi hogar… voy hacia delante esperando encontrar el camino, pero el camino solo lo veo detrás, hecho de sangre, cada paso es una gota más, y cada gota es un paso mas que tengo que dar… estoy cansado… un hoyo negro devora… mis lagrimas inundan… no puedo más…. Ni un pasó más…

“Yo lo sé…sé que no tiene sentido este esfuerzo, pero estas atado a esta realidad, ahora atado al gatillo de tu arma, a la certeza de tu tiro, a la culpa y alivio de salir vivo, cuando salgas, en tus sueños, en tu ánimo, un delirio de volver a disparar… ya estás adentro y no puedes salir, esta caminata durará mientras sigas con vida y quizá aún después, átate a tu esperanza y sigue con vida, que tu corazón siga latiendo con tus pasos, no dejes de caminar o tu corazón se detendrá, camina, resiste, sigue caminando, sé que estás cansado…”

Tienes que seguir latiendo,-a mi propio corazón le hablo pues la sangre me ha dejado solo-… tienes que latir, incluso cuando odio verte así… pero no hay vuelta atrás…esta nieve bajo nuestros pies ya es una trampa de sangre, no nos dejará regresar… no llores, no tiene caso… yo sé que no llegaremos a ningún lado, pero debemos seguir con vida…no llores… sigue caminando… sé que estás cansado… lo sé…