Otro Mundo

Otro Mundo

El papel recita sinfonías, la voz grita asonancias, un rayo de luna es tenue en el instante en el que se sintoniza un momento de pasada armonía, pero esta noche la luna es tragada por el silencio, guardamos silencio… hay un pozo de gusanos en medio de un campo de flores, hemos escarbado profundo, materia gris ennegrecida, sangre hervida, sonrisas destiladas, esencias deformadas, ya no hay pájaros en los nidos, solo deseos frustrados…

Acabándonos las lágrimas optamos por la sangre, acabándose las caricias, optamos por los cortes, los huesos crujen cada noche ente una cama de hierro, pensar en lo que fue y lo que es no es más que una tortura a la memoria… correr, escondernos, evitar la mirada directa, vivir al filo de la navaja es con lo que se remplaza el placer de ser felices…he paseado por los cielos nocturnos y vagado por las calles de lo que ya no existe, extraño los susurros en el oído, extraño las miradas ansiosas, extraño ese mundo…

Mil gotas de sangre que no valen una de sudor, una canción hecha de silencio, cuando el bebé mata a la madre, cuando los secretos se leen en periódicos, cuándo los ángeles guardianes le dan la espalda a los protegidos… el Cupido escupiéndole al amor, la valentía incitado al terror, la tranquilidad en una escena suicida, soledad tan entristecida por su compañía, nuestros dulces sueños deseándonos pesadillas…

Una ciudad en arenas movedizas, la euforia de una noche en vela cambiada por la vela negra de la inseguridad en nuestras manos… el mar de la fe bebido por los dioses de la apostasía, eclipses en nuestros gestos, cicatrices en nuestros ojos atendiendo la soberbia que se necesita para no llorar, los extraños que comparten conmigo las fotografías, el desconocido que se esconde en el espejo y que habla conmigo todos los días…

He buscado las miradas, desesperado, tratando de ilusionar desdén de almas desesperadas, en el instante en el que el sueño se acabó encontré la puerta hacia otra dimensión… nunca he logrado comprender el amanecer y siempre ha sido duro despertar… he conseguido sanación dibujando cicatrices en mis brazos, he roto el cráneo de la cordura y he brindado con sangre en compañía de los fantasmas propietarias de las caras en las fotos…

No soy un santo… he devorado las alas de los ángeles y les he arrancado los cuernos a algunos demonios… sin embargo conocí el paraíso y sin embargo, ahora no creo en los ángeles…solo en las cenizas… no siento haberlos visto, han sido borrados de mi memoria… la cara de la tristeza en pequeñas hadas sin alas, el infierno en nuestras voces ha estallado en medio de nuestras almas, jamás entenderé la primavera y aparentemente jamás escaparé del invierno… y se ha vestido diferentes… ya no reconozco su belleza, ya no reconozco su frialdad o su tibieza… creo que me equivoque de lugar…

Los dientes que me mostraron alguna vez aprecio ahora tiran de mi alma, los lugares visitados están inundados de fango, las telarañas en nuestros ojos, el moho en nuestros abrazos, el frío quemante de cada beso de hola y adiós… he buscado calor y he ardido en el sol, he buscado tibieza y solo en mi sangre caliente he logrado dormir sin frío… que dolor es peor que el que se encuentra tan inalcanzable como el pasado…Y el pasado ha pasado, pero lo veo marcado en cada uno de mis pasos, lo atestiguo con sobrenaturalidad, le temo con terror sobrehumano, como jamás lo había visto de donde vengo…

Descociendo los hilos dorados de la inconsciencia, he encontrado criptas de nadie, no reconozco sus nombres, no reconozco sus caras, son rostros olvidados perdidos en la nada, vagado por su inexplicable masoquismo… quien diría que es mas fácil llegar a no ser, cuando ya se ha sido todo… estas lágrimas son de azúcar, son un iceberg gigante flotado en lagunas mentales, pero en mi boca se vuelven amargas, en mis ojos se evaporan y en el pasado se conforman con no ser olvidadas…

¿Quién se robo nuestro Halloween? ¿Quién se robo nuestro mes de abril? ¿Cuándo se sesgo nuestro vals triunfal y la hoz de la tristeza cegó nuestra invencibilidad?... hemos cambiado ruiseñores por tarántulas, manzanas por serpientes… en la catarata otoñal de las memorias caen lágrimas en lugar de hojas… ¿quién será capaz de sumergirse en los recuerdos y rescatar una sonrisa

No hay verde en el pasto ni azul en el cielo, gris es todo lo que ahora veo, manchas monocromáticas en los ojos ajenos y los míos creo se encuentran ausentes y vacíos… había una vez, sonrisas, erase una vez, la felicidad…

No conozco a esta gente, no se que son estas cosas a las que les llaman flores, no conozco este aroma, es tan etéreo que dudo haberlo experimentado alguna vez, no conozco esta sensación, se siente tan bien que no puede ser real, aquel debe de ser otro cielo, es azul y las nubes son blancas, la piel no duele y las miradas no calan, debe ser otro suelo, hay color en el y hay gente abrazada que no desaparece, recostada, este debe ser otro aire, no lloro cuando lo respiro, debe ser una historia completamente diferente, otro mundo totalmente…ya nada es igual...